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En varias ocasiones se han planteado determinadas atribuciones que distintos eruditos han aportado como conclusiones a sus estudios sobre el tema, sin embargo ninguna de ellas parecía ser tan contundente como la que ahora presenta Juan Manuel Miñarro.
Desde la atribución unánime a Pedro Roldán que se hizo en el siglo XIX hasta hoy José Gestoso, Enrique Repeto, Sancho Corbacho, José Hernández Díaz, Hilario Arenas, Victoria García Olloqui, José Roda Peña, Palomero Páramo, Luis Álvarez Duarte, González Isidoro, Atonio Torrejón Díaz, Andrés Luque Teruel o José Luis Romero Torres, son algunos de los especialistas que a lo largo de los años han pretendido dar con una teoría plausible acerca del autor o autora de la Macarena. A pesar de la línea argumental de estos investigadores, no había acuerdo acerca de las más atinadas atribuciones que se habían dado.
Miñarro ya apuntaba en su tesis doctoral, en 1987, la imagen de la Virgen se podía atribuir a Juan de Mesa con analogías técnicas con el Señor del Gran Poder. Y desde entonces ha seguido en esta línea con estudios como el que realizó en 2011 en el que Miñarro afirmaba que «basándome en los rasgos anatómicos como la configuración expresiva de los arcos de las cejas, o el fruncimiento de la rama interna del frontal, o el mecanismo de la expresión de la boca, la elevación de las aletas nasales, y comparando con la estructura de los crucificados de Mesa -el Amor o la Buena Muerte-, podemos apreciar un singular parecido en el rostro de la Macarena, lo que nos acercaría indudablemente a Juan de Mesa».
Entonces también decía el profesor doctor Juan Manuel Miñarro López: «A ello habría que añadir la lengua proyectada sobre los dientes inferiores, ese algo de respiración contenida que tienen los Cristo de Mesa» Y decía que «más que una doctrina es una sensación, pero no la puedes pasar por alto. Se ve una mano común. Lo que sí está claro es que no es de Hita del Castillo. Tengamos en cuenta que, en aquellos tiempos en que las gubias no estaban hachas en serie, se puede identificar la gubia de un autor analizando su imagen». Miñarro es un reconocido escultor e imaginero y por tanto, desde su experiencia como tal, conoce perfectamente el oficio de imaginero que le permite contrastar los trazos de la talla y conoce los rasgos morfológicos para identificar a la perfección la posible autoría, pero no sólo desde ese análisis morfológico puede establecer una atribución. Miñarro va más allá.
Su estudio, publicado por ABC este 16 de diciembre en plenas celebraciones de la fiesta de la Esperanza, aporta una metodología de la que el imaginero y escultor sevillano es buen conocedor. Ha usado el procedimiento de superposición de capas con la metodología forense de la fotometría que Juan Manuel Miñarro ha aplicado en su investigación sobre la Sábana Santa y el Sudario de Oviedo. Además supone un avance frente a los criterios que se habían aplicado hasta la fecha (documental, histórico y estilístico), y muy novedoso por cuanto no se había establecido nunca esta pauta científica que ha llevado a nuestro insigne artista y profesor a la conclusión de que la Virgen de la Esperanza Macarena «es una talla reformada en el siglo XVII por Juan de Mesa, gracias a los grafismos que tiene en común con la imagen mariana por antonomasia del escultor: la Virgen de las Angustias de Córdoba».
Juan Manuel Miñarro ha señalado que no pretende demostrar nada sino «aportar una comprobación sobre una hipótesis, una teoría que me transmitió en la década de los años 80 don Hilario Arenas, con argumentos, sobre que la Macarena tenía algo de una transformación en la imagen y que podía ser de Juan de Mesa». También ha comentado sus conversaciones con especialistas como el profesor Alberto Villar Movellán, gran conocedor de la obra de Mesa y con otros como Arquillo o Fuensanta de la Paz, que restauraron a la Esperanza Macarena. Pero no hay documentos por escrito que digan quién es su autor, y ahí es donde entra la atribución. De ahí este estudio de Miñarro en el que la ciencia moderna puede aportar una nueva línea de trabajo para poder desvelar esta teoría de Hilario Arenas y concluir que la imagen, que originariamente no era dolorosa, fue intervenida por Juan de Mesa para darle el aspecto actual.
El próximo jueves en Radio La Manigueta, en el programa Carrera Oficial, Eduardo Luna entrevista al profesor Juan Manuel Miñarro López, desvelando algunos de los más significativos aspectos de este informe que podría poner fin a una de las incógnitas que desde hace tanto tiempo se ha intentado desvelar, sobre una de las devociones más arraigadas no sólo en Sevilla: ¿quién hizo la Macarena?.
JUAN MANUEL MIÑARRO LÓPEZ
Escultor especializado en imaginería y restaurador. Nacido en Sevilla el 29 de enero de 1.954.
Formado academicamente en la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla. Paralelamente a sus estudios realiza aprendizaje en el taller de Francisco Buiza Fernández. Finaliza la licenciatura en Bellas Artes en el año 1.984, y culmina en el 1.987 su tesis doctoral titulada «Estudio de anatomía artística para la iconografía del Crucificado en la Escultura».
Desde 1988 es profesor de la Escuela de Bellas Artes de Sevilla, siendo nombrado posteriormente catedrático en la especialidad de escultura, actividad que comparte con la ejercida en su taller sevillano de la calle Viriato.
Es un estudioso de la Sabana Santa, y utiliza los resultados de sus investigaciones para mejorar el realismo de las representaciones escultóricas de Jesús de Nazareth, como en el Cristo de la Universidad de la Hermandad Universitaria (Córdoba) terminado en el año 2010 o el Yacente Sindónico del Museo de la Pasión de Cabra, en 2019.
Autor de la imagen de Ntro. Padre Jesús de las Penas y de la Oración en el Huerto (1987) y del Misterio (1988), así como de la escultura de José Solís en el Paseo, lo es también de las distintas piezas que se exhiben en el Museo de la Pasión y del Cristo de la Fundación (2018) que se venera en el Oratorio de la Purísima de la Fundación Aguilar y Eslava, está muy vinculado con nuestra ciudad.
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