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Si bien es cierto que el acceso a internet y al mundo interconectado facilita el flujo de información, no es menos cierto que la mayoría de las veces esa información está mucho más cerca de lo que pensamos.
Un claro ejemplo es la Hermandad de Nuestra Señora del Mayor Dolor de Cabra, la cual hasta hace pocos años reducía su corta historia a una fundación en 1955 a cargo de la familia Fernández Ávila y que en pocos años ha visto crecer su patrimonio histórico debido a la aparición de documentos que hablan de la llegada a la localidad de Cabra de la Imagen en 1770 al convento de Capuchinos egabrense, procedente de un convento de Écija y el posterior traslado a la Parroquia de la Asunción y Ángeles de la misma localidad en 1850.
También hemos tenido noticias, a través de documentos llegados desde el archivo histórico provincial de Córdoba, de la primera hermana mayor conocida, que fue Dª Mª Cruz Narváez Portocarrero en 1812. Incluso ha sido atribuida la talla al escultor antequerano Antonio del Castillo por el historiador de arte Jesús Romero Benítez y que quedó reflejado en el monográfico que dicho historiador escribió sobre el artista de la localidad del Torcal en el año 2013.
Ahora hemos tenido conocimiento de una pieza nueva de ese puzle histórico de la hermandad de la mañana del Viernes Santo egabrense. Se trata de una estampa (huella de la plancha 130x90 mm., en h. de 137x95 mm.) que se custodia en el archivo municipal de Huelva, fechada en Sevilla en 1778 y cuyo autor es José Braulio Amat. Dicho documento ha sido puesto en conocimiento de la historiadora egabrense Lourdes Pérez Moral, quien ha hecho llegar la información a la hermandad.
La estampa nos muestra una visión totalmente desconocida de la Imagen de Nuestra Señora del Mayor Dolor, sentada delante de una cruz con un sudario sujeto por dos clavos. La antigua diadema queda también reflejada en la imagen, así como los bordados del manto, algunos de los cuales fueron usados para la realización de una saya que aún posee la hermandad.
La Virgen se encuentra sobre una peana donde se lee la inscripción nullus dolor amarior, quia nulla proles charior, frase con la que San Buenaventura se dirigió a María y cuyo significado puede traducirse "no puede hallarse dolor más amargo que el vuestro, porque no puede hallarse Hijo más amado que el vuestro". Dicha frase aparece en el libro Las Glorias de María, de S. Alfonso María de Ligorio.
El grabado recoge una inscripción hecha por el propio autor donde hace referencia a la Imagen, a su ubicación en la Capilla del Sagrario del Convento de Capuchinos de Cabra.
Igualmente se puede observar que la imagen está fechada en Sevilla en 1778. Cabe destacar que, según la historia del Convento de Capuchinos de Cabra escrita por Fray Nicolás de Córdoba, la Imagen del Mayor Dolor llega a Capuchinos en septiembre de 1770, por lo que dicha estampa se produce poco después de su llegada a la capilla del Sagrario de dicho convento.
José Braulio Amat fue grabador en lámina y en hueco, nacido en Sevilla en 1747 y que se encargó de la dirección de la Casa de la Moneda entre los años 1786 y 1788. Posteriormente llegó a grabar dos medallas: la conmemorativa Proclamación de Carlos IV en Antequera en 1789 y La Academia de Sevilla conmemora el voto real en 1796.
Un nuevo documento que viene a engrandecer, más si cabe, el patrimonio cofrade de Cabra y que abre otros muchos frentes de estudio sobre la bella Imagen de la dolorosa que actualmente recibe culto en la Parroquia de la Asunción y Ángeles y que cuenta con más de 300 años de devoción.
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